27-III. Más allá de todo símbolo

UN CURSO DE MILAGROS
CAPÍTULO 27
LA CURACIÓN DEL SUEÑO




1. El poder no puede oponerse a nada. Pues ello lo debilitaría, y la idea de un poder debilitado es una contradicción intrínseca. Una fuerza débil es algo que no tiene sentido, y si el poder se utiliza con el propósito de debilitar, se está utilizando para limitar. Por lo tanto, no puede sino ser limitado y débil, ya que ése es su propósito. Para ser lo que es, el poder no puede tener opuestos. Ninguna debilidad puede adentrarse en él sin convertirlo en algo que no es. Debilitar es limitar e imponer un opuesto que contradice al concepto que ataca. Y ello añade al concepto algo que es ajeno a él, y lo hace ininteligible. ¿Quién podría entender conceptos tan contradictorios como "un poder-débil" o "un amor-odioso"?

2. Has decidido hacer de tu hermano el símbolo de un "amor-odioso", de un "poder-débil", pero sobre todo, de una "muerte-viviente". Y así, él no significa nada para ti, pues representa algo que no tiene sentido. Representa un pensamiento que se compone de dos partes, en el que una de ellas anula la otra. Sin embargo, la mitad que fue anulada contradice de inmediato a la otra, de modo que ambas desaparecen. Y ahora él no representa nada. Los símbolos que no representan otra cosa que ideas inexistentes no pueden sino representar la vacuidad y la nada. Sin embargo, la vacuidad y la nada no pueden ser una interferencia. Lo que puede interferir en la conciencia de la realidad es la creencia de que hay algo en ellas.

3. La imagen de tu hermano que ves no significa nada. No hay nada en ella que atacar o negar, amar u odiar, dotar de poder o considerar débil. La imagen ha sido completamente obliterada porque era el símbolo de una contradicción que anulaba al pensamiento que representaba. Por lo tanto, la imagen no tiene causa en absoluto. ¿Quién puede percibir efectos sin causa? ¿Qué puede ser aquello que carece de causa, sino la nada? La imagen de tu hermano que tú ves jamás ha estado ahí ni jamás ha existido. Deja, pues, que el espacio vacío que ocupa se reconozca como vacante, y que el tiempo que se haya dedicado a verla se perciba como un tiempo desperdiciado en vano, un intervalo de tiempo en blanco.

4. Un espacio vacío que no se percibe ocupado, y un intervalo de tiempo que no se considere usado ni completamente empleado, se convierten en una silenciosa invitación a la verdad para que entre y se sienta como en su casa. No se puede hacer ningún preparativo que aumente el verdadero atractivo de esta invitación. Pues lo que se deja vacante Dios lo llena, y allí donde Él está tiene que morar la verdad. La creación es un poder que no se puede debilitar y que no tiene opuestos. Para esto no hay símbolos. Nada puede apuntar hacia lo que está más allá de la verdad, pues, ¿qué podría representar a lo que es más que todo? El verdadero des-hacimiento, no obstante, tiene que ser benévolo. Por lo tanto, la primera imagen que reemplaza a la tuya, es otra clase de imagen.

5. De la misma manera en que la nada no puede ser representada, tampoco existe un símbolo que represente a la totalidad. La realidad, en última instancia, sólo se puede conocer libre de cualquier forma, sin imágenes que la representen y sin ser vista. El perdón aún no se reconoce como un poder completamente exento de límites. Sin embargo, no fija ninguno de los limites que tú has decidido imponer. El perdón es el medio que representa a la verdad temporalmente. Le permite al Espíritu Santo llevar a cabo un intercambio de imágenes, mientras los recursos de aprendizaje aún tengan sentido y el aprendizaje no haya concluido. Ningún recurso de aprendizaje es útil una vez que se alcanza el objetivo del aprendizaje pues entonces deja de tener utilidad. Pero durante el aprendizaje se utiliza de una manera que ahora temes, pero que llegarás a amar.

6. La imagen de tu hermano que se te ha dado para que ocupe el lugar que tan recientemente dejaste desocupado y vacante no necesitará defensa de ninguna clase. Pues le darás una preferencia abrumadora. No te demorarás ni un instante en decidir que ésa es la única imagen de él que quieres. No representa conceptos contradictorios, y aunque no es más que la mitad de la imagen y está incompleta, en sí misma es homogénea. La otra mitad de lo que representa sigue siendo desconocida, pero no se ha anulado. Y de este modo, Dios queda en libertad para dar el paso final. Para esto no necesitas imágenes ni recursos de enseñanza. Y lo que en última instancia habrá de ocupar el lugar de todo recurso de enseñanza sencillamente será.

7. El perdón se desvanece y los símbolos caen en el olvido, y nada que los ojos jamás hayan visto o los oídos escuchado queda ahí para ser percibido. Un Poder completamente ilimitado ha venido, no a destruir, sino a recibir lo Suyo. Con respecto a tu función, no hay opciones entre las que elegir en ninguna parte. La opción que temes perder, nunca la tuviste. Sin embargo, eso es lo único que parece ser un obstáculo para el poder ilimitado y los pensamientos homogéneos, los cuales gozan de plenitud y felicidad y no tienen opuestos. No conoces la paz del poder que no se opone a nada. Sin embargo, ninguna otra clase de poder puede existir en absoluto. Dale la bienvenida al Poder que yace más allá del perdón, del mundo de los símbolos y de las limitaciones. Él prefiere simplemente ser, y, por lo tanto, simplemente es.









Texto de Un Curso de Milagros