El fin del dominio del ego y la curación de la mente


Jesús nos dice en el cap.4:  
El Primer Advenimiento de Cristo no es más que otro nombre para la creación, pues Cristo es el Hijo de Dios. 
El Segundo Advenimiento de Cristo no significa otra cosa que el fin del dominio del ego y la curación de la mente. 
Al igual que tú, fui creado en el primero, y te he llamado para que te unas a mí en el segundo. Estoy a cargo del Segundo Advenimiento, y mi juicio, que se usa solamente como protección, no puede ser erróneo porque nunca ataca. El tuyo puede estar tan distorsionado que hasta creas que me equivoqué al escogerte. Te aseguro que eso es un error de tu ego. No lo confundas con humildad. 
Tu ego está tratando de convencerte de que él es real y de que yo no lo soy, ya que si yo soy real, no puedo ser más real que tú. Ese conocimiento, y te aseguro yo que es conocimiento, significa que Cristo ha venido a tu mente y la ha sanado. 
Yo no ataco a tu ego. Trato con tu mente superior - la morada del Espíritu Santo - tanto si estás dormido como si estás despierto, al igual como tu ego trata con tu mente inferior, que es su hogar. Me mantengo alerta por ti con respecto a esto porque tú estás tan confundido que te resulta imposible reconocer tu propia esperanza. No estoy equivocado.  
Tu mente optará por unirse a la mía, y juntos somos invencibles. Tú y tu hermano os uniréis finalmente en mi nombre, y vuestra cordura os será restaurada. Resucité a los muertos porque sabía que la vida era un atributo eterno de todo lo que el Dios viviente creó. ¿Por qué crees que habría de ser más difícil para mí inspirar a los des-animados o estabilizar lo inestable? Yo no creo que haya grados de dificultad en los milagros; tú sí. 
Te he llamado y tú responderás. Yo comprendo que los milagros son acontecimientos naturales porque son expresiones de amor. El que yo te llame es tan natural como el que tú me respondas, e igualmente inevitable.







Texto de Un Curso de Milagros