Dar es recibir

Hoy aprendo la ley del amor: que lo que le doy a mi hermano es el regalo que me hago a mí mismo. * 

Soy un sólo Ser que aún cree estar dividido. No me veo como realmente soy sino que me creo fragmentado en otros seres, pues eso es lo que aún veo. La metáfora del hermano es hacer que mi mente se acostumbre a ver esos 'fragmentos' de mí (todas las personas) unidos a mi Ser, pues en verdad estamos unidos desde que nuestro Padre nos Creó. Pero el objetivo final es no ver cuerpos sino ver un mismo Espíritu. Cristo, el Ser que Soy. Entendiendo esto, mi hermano es el primer paso para alcanzar el conocimiento.

Siendo lo que soy, un solo Ser, lo que le doy a mi hermano es lo que recibo de él. Es el regalo que me hago a mí mismo. Así observo qué recibo de él:

¿Es alegría? Si recibo alegría es porque creo en la alegría, creo que está en mí, y al creer en ella la extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra alegría es porque eso es lo que le he dado.

¿Es salud? Si recibo salud es porque creo en la salud, creo que está en mí, y al creer en ella la extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra salud es porque eso es lo que le he dado.

¿Es paz? Si recibo paz es porque creo en la paz, creo que está en mí, y al creer en ella la extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra paz es porque eso es lo que le he dado.

¿Es amor? Si recibo amor es porque creo en el amor, creo que está en mí, y al creer en el amor lo extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra amor es porque eso es lo que le he dado.

¿Es dolor? Si recibo dolor es porque creo en el dolor, creo que está en mí, y al creer en él lo extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra dolor es porque eso es lo que le he dado.

¿Es rabia? Si recibo rabia es porque creo en la rabia, creo que está en mí, y al creer en ella la extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra rabia es porque eso es lo que le he dado.

¿Es odio? Si recibo odio es porque creo en el odio, creo que está en mí, y al creer en él lo extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra odio es porque eso es lo que le he dado.

¿Es miedo? Si recibo miedo es porque creo en el miedo, creo que está en mí, y al creer en él lo extiendo a mi Ser. Si mi hermano me muestra miedo es porque eso es lo que le he dado.

Y así es con todo lo que se me ocurra. En definitiva ¿en qué creo? Todo lo que veo en el mundo lo veo porque he creído en ello. Por lo tanto, observo que todo lo que recibo de mi hermano es porque se lo he dado y eso sucede simplemente porque no hay un otro, mi hermano y yo somos el mismo Ser. 
Aprender que dar es lo mismo que recibir tiene una utilidad especial, ya que se puede poner a prueba muy fácilmente y comprobar que es verdad. *
El Espíritu Santo me dice: 
"Eres Paz, eres Dicha, eres Amor. Consuélate porque todo el miedo, el dolor, la rabia, el odio que crees que hay en ti no son verdad, son fruto de sentirte culpable por algo que en verdad NUNCA ocurrió. Nunca te separaste de tu Padre. Eso NUNCA fue real. Sigues Unido a Él pues Eres el Ser de Dios. 
"Tu hermano no es diferente a ti, eres tú.  
"Para ver miedo, dolor, rabia, odio etc tienes que creer en ello. Es el momento de dejar de creer en ello. Esos pensamientos no son ni buenos ni malos, no son nada. No son reales. En nuestro Espíritu no existe nada de todo eso, somos como nuestro Padre.
"El sentido definitivo del perdón es darle media vuelta a todo eso. Todos son decisiones que tú tomas y tu estado mental es el efecto de esas decisiones.
"Cuando veas en tu hermano miedo, dolor, rabia... recuerda que nada de eso es verdad. Tu hermano es Paz, es Dicha, es Amor pues éso es lo que tu Ser es. 
"Aprende a ver a tu hermano sin juzgar. Sea lo que sea que recibas de él vé en él lo que en Verdad Es y suelta lo que no es. Da a tu hermano Paz, Dicha, Amor. Ignora las ilusiones, recuerda tu inocencia viendo su inocencia. Si lo ves inocente así es como creerás que tú eres. Adiestra a tu mente a ver de esta manera.
"Cuando das de esta manera recuperas tu unicidad, recuperas la verdad de tu Ser.
Cuando observas la vida desde el perdón la observas sin juzgar, porque sabes que todo lo que observas forma parte de una misma ilusión en la que sólo hay separación. Abstenerse de juzgar es comprender que tu Ser está Unido y que lo que ves es sólo un velo que te está impidiendo verlo como Lo Que Es. 

Lo que creo aún que son los fragmentos de mi Ser, mis hermanos, son la ayuda que Dios me da para recordar Quién Soy. Si les doy lo que realmente Es mi Ser en vez de lo que creía que eran estoy recibiendo el recuerdo de mi Unicidad. 

Al dar de esta manera estoy reconociendo la inocencia de mi hermano, estoy llevando toda ilusión de lo que creía que era ante la verdad: él es Amor, es Paz, es Dicha. Es mi Ser. El Hijo de Dios. Estoy percibiendo de otra manera y perdono toda ilusión.

Por eso dar es recibir porque nos damos a nosotros mismos. Siempre. 
Dar Paz, Felicidad, y Amor es reconocer lo que realmente Somos.
La única corrección posible para la percepción falsa es la percepción verdadera. ... El perdón, la salvación, la Expiación y la percepción verdadera son todos una misma cosa. Son el comienzo de un proceso cuyo fin es conducir a la Unicidad que los transciende a todos. La percepción verdadera es el medio por el que se salva al mundo de las garras del pecado, pues el pecado no existe. Y esto es lo que la percepción verdadera ve. *











Texto de Un Curso de Milagros