El Velo del engaño


¿Cómo miras un cuerpo, mirando cada uno de sus fragmentos diminutos o en su totalidad? 

Cada ser vivo es un fragmento de tu Ser y tu Ser es Pura Luz. ¿Cómo ver la Totalidad de tu Ser en vez de percibir una ilusión? 

Escucha a tu Corazón, escucha Su Voz. 

Cuando reconoces en todo ser esta Luz y dejas de lado todo juicio, entonces, estás viendo con la visión de tu Ser.

La máscara externa, el cuerpo, es el velo que te impide ver tu Ser y el mundo se entretiene en juzgar la máscara como si ésta tuviera vida propia ¡pero es sólo una máscara! 

La máscara, el cuerpo, es una INVENCIÓN del ego. No es real. Y el ego la usa para convencerte de que tú no eres más que un cuerpo. Para hacerte olvidar tu Origen Luminoso. 

Pero Dios, te está ayudando. Su deseo es que lo recuerdes, y por eso está usando lo que inventó el ego para que descubras por ti mismo lo que en verdad Eres. 

La señal de que Dios te habla a través de cualquier máscara es sentir Amor, o cualquiera de sus "capas" (ternura, gratitud, alegría, confianza, compasión, perdón, humildad...). 

La señal de que te habla el ego a través de cualquier máscara, es sentir miedo o cualquiera de sus "capas" (tristeza, desesperanza, rabia, odio, desconfianza, dureza, rencor, ansiedad...). 

Tu Ser ES AMOR, no es posible que sientas algo distinto al Amor viendo cualquiera de tus "fragmentos" , si lo que sientes no es Amor lo único que puedes hacer es corregir el error AMANDO, mostrando verdadero Amor, sin condiciones. Es decir: hacer lo contrario de lo que te pide el ego. Porque al mostrar Amor haces que ese velo se disuelva más y más, y puedes ver ya sin ningún obstáculo la Luminosidad del Ser que Eres.

Nunca olvides que lo que está tras la máscara es tu Ser. La máscara es sólo un velo que el engaño puso ante ti. Así que por mucho que una máscara (cualquier ser vivo) aparente hacer algo no amoroso, del tipo que sea, por muy grave que parezca, SIEMPRE es Inocente. Si lo ves como culpable el engaño se apunta otro tanto, porque estarías confirmándote a ti mismo que sólo eres un cuerpo en vez del Ser Eterno y Luminoso que en verdad está ahí. Y eso es lo que el engaño quiere que creas, porque si llegas a recordar Quién Eres todo lo que el engaño inventó desaparecería, al igual que él. Y al engaño le encanta este mundo de guerras, poder, y placeres finitos.

No es ni malo ni bueno percibir el cuerpo, simplemente no es real. Al juzgarlo de una manera o de otra lo haces real. Caes en el error, en el engaño.

Tu único error es escuchar lo que el ego te dice 
en vez de escuchar a Dios. 

¡Recuerda! y comprobarás por ti mismo la Belleza de tu verdadero mundo.









Texto de Un Curso de Milagros